El obispo católico Oliver Dashe Dome, reveló que unas 20 iglesias cristianas en el noreste de Nigeria fueron destruidas tras ser atacadas en las últimas dos semanas por insurgentes islámicos.
Desde el 2009, cuando los ataques de Boko Haram se intensificaron, han muerto más de 500 feligreses, según el obispo. En los más recientes ataques, los terroristas han matado a 180 personas, entre ellos 60 niños.
Boko Haram, ha amenazado a la minoría cristiana que vive en el noreste de Nigeria abogando por la imposición de la sharia, la versión extrema de las leyes islámicas.
Los ataques del grupo han provocado que el gobierno de Nigeria declare estado de emergencia en tres estados en los últimos nueve meses, y a pesar de los intentos de las autoridades, los insurgentes siguen matando más cristianos en estas localidades.
Para el obispo Dome, el gobierno es el culpable de esta “carnicería”, porque Boko Haram, está mejor armado que el ejército de Nigeria. El religioso también se queja de la falta de preocupación del gobierno sobre la velocidad en que ocurren tantos asesinatos.
Traducido y adaptado de Daily Star
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